jueves, 26 de noviembre de 2015

Ya la jaula de cristal se ha fracturado y el mundo muestra sus visceras





 
  
 Fotografía: Chema Madoz

  


a Elizabeth Shön


Ya la jaula de cristal se ha fracturado y el mundo muestra sus vísceras
la luna se hace cargo de su paso
no dice aquí estoy

no reclama no dice nunca

está sola       
y sin miradas

¿qué ha deseado?
¿qué tentación transfigurada se rasga en su ser de claridad intransigente?
¿necesita acaso olvidarse de su nacimiento para hacerse otra piel que luego se agujere?

hay estrechez   cautela   razones
entrepiernas que se cierran y se postran  atropellan y ahuyentan
haciéndola estúpida estudiosa del recato
cuando un perro cuelga de su sudor
mientras se dosifica en mieles
sonríe
sin mostrar su feroz ruido
su caminar de aguante y muérdete las uñas
el embellecido transpirar del crisantemo la rosa muerta hace diez siglos
el verso sin la espada

asumo la ruta que me signa esta belleza que se estropea en mi
sin ser la lenta convención de los laureles
ni la olorosa y movediza transparencia de quien se reafirma ante el espejo

es la cordura de lo frágil persistente
el indeseable desvelo ante el encuentro en que lo diga
muy a pesar de la otra
he visto las escaleras los muros
he atravesado con destreza ciertos pasajes
y no he querido mirar más

no he querido participar aun sabiendo que soy la única culpable
la que guarda sus fieras y las amamanta y las pellizca
me coloco en el fuego y doy la pista sola
y ordeno frasquitos endurecidos
ya he memorizado el juego
vacío los tímpanos y me paso al lado del espejo que no me gusta
la costra va escapándose de la trampa
hay una soga de aguante que se repule

la gruta se pasea de escala en verso
soy una adversión de cosas que se mezclan
tanteo la soledad sin rasgar lo necesario
el papel hace tiempo está desecho

Ximena Benítez
De Temporares en Extamuros, Fondo Editorial IPASME, Caracas, 2007